viernes, 10 de enero de 2020

“LA FERNANDINA”, UN REVÉS CONVERTIDO EN VICTORIA

Autor Hernández Giró, 1939




El 10 de enero de 1895 hace hoy 125 años, se produjo la incautación de los tres barcos surtos en el puerto de La Fernandina, en la Florida, comprados y preparados por el Partido Revolucionario Cubano (PRC) de José Martí para reiniciar la Guerra Necesaria por la independencia de Cuba.
 Una delación artera y cobarde, por uno de los pocos colaboradores del Apóstol que sabía todos los detalles del Plan fue suficiente para la intervención de la autoridades de los Estados Unidos, azuzados por el gobierno colonial español de la isla, dando al traste con los planes celosamente preparado por Martí y que tantos rumores adversos despertaron entre muchos separatistas cubanos, que pusieron en duda la capacidad de Martí para organizar tamaña empresa.
 Para José Martí aquel golpe fue muy duro para su estabilidad de salud, aunque con la férrea voluntad que le caracterizara, desde los primeros momentos del artero golpe movió cielo y tierra, primero para recuperar lo que pudiera recuperarse desde el punto de vista material y luego llamando al sacrificio a sus bases para levantar nuevos fondos y conseguir el sagrado objetivo de hacer de Cuba una República.
 Pero hay otro factor que jugó su papel en favor del liderazgo de Martí y del Partido que lideraba: los planes que se habían hecho para lo que se conoce en nuestra historia como el Plan de la Fernandina,  fueron preparados con una compartimentación formidable dirigida directamente por él, pocas personas lo conocían y el rumor sobre el destino que se le estaba dando al dinero de los emigrados y colaboradores cubanos, enturbiaba el liderazgo del Apóstol, pero la detallada información que hizo la prensa amarillista norteamericana sobre  el volumen de lo ocupado, su fin y el detalle del plan concebido, actuó como un factor enaltecedor del Maestro como estratega militar y político, cuyo prestigio quedó enraizado en la conciencia de todos aquellos que querían a Cuba Libre.
 Martí emergió de aquel revés con un liderazgo sólido y la unidad de los cubanos dentro y fuera de la isla alrededor de la idea emancipadora a la cual dedicó su vida y sus esfuerzos, a más de la convicción de los indecisos sobre la  necesidad de reiniciar la Guerra Necesaria en bien de Cuba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario